Tras el éxito del Perico Delgado, Topo repetía la fórmula en la cuesta abajo de los ocho bits. Le queda un juego correcto pero por detrás de su predecesor, ya que prácticamente se limita a repetir fórmula pero con dispar suerte en la elección de las fases. Las etapas de llano son idénticas, aunque sin tener que recoger comida. La etapa de la escalada no tiene sentido, es igual que la de llano pero con gráficos distintos, y el sprint final es idéntico al del Perico pero con perspectiva lateral en vez de superior.
Un juego de dificultad baja que seguro que no tardaréis en superar. Al menos en esta ocasión la clasificación general del Tour sí que funciona bien.