PARTIDA COMPLETA Guardia Sepulcral (reeditada) VS Portaplagas de Skabbik
Una enorme rata mutada por la piedra bruja, escarbaba en la tierra. Sus garrosas patas se hundían en el lecho buscando algo... El sonido rasposo que generaba al remover la tierra suelta del suelo arenoso, cambió a un ruido metálico, cuando comenzó arañar con sus negras uñas una chapa de metal. El monstruoso roedor comenzó a chillar y a escarbar más frenéticamente, desenterrando lo que parecía una coraza... Skabbik notó un cambio en los vientos de magia, y rápidamente agitó su campanilla de piedra bruja. El ruido del diminuto artefacto era ensordecedor. El sonido retumbó en las cavidades óseas de la calavera cenicienta del Guardián Sepulcral. Sintió la urgencia de los peticionarios, que en su eterna servidumbre, se hallaban semi-enterrados, en reposo. La fuerza de voluntad del Guardián era fuerte bajo la influencia del hechizo de resurrección de Nagash, y el le recompensaría con la entrega de las vidas de aquellos que turbasen su territorio. La enorme rata paró de escarbar con el tañido de la campanilla, solo para ver como detrás de la herrumbrosa coraza, se levantaban los restos óseos de un guerrero, dispersando tierra suelta y polvo en su despertar. La confusión de la rata duró pocos segundos, fue atravesada por una antigua espada, empuñada por unas manos huesudas de otro no-muerto que se esforzaba por terminar de levantarse de su lecho de tierra.
Los tañidos continuaron, y los orificios de una suerte de bola con pinchos hueca que colgaba de una cadena que sostenía Skabbik, comenzaron a emanar un denso humo verdoso, que parecía tener voluntad propia. El arma de Rabbidus también pareció activarse, emitiendo el ponzoñoso icor verdoso, que caía pesado sobre el piso, corrompiendo el territorio. El resto de portaplagas se animaron jaleando ruidosamente el inicio de la corrupción. La rata cornuda últimamente se demostraba muy generosa repartiendo sus bendiciones entre los miembros del clan Pestilens, y estos se lo agradecían generando más plaga por todo el territorio que pisaban. El Guardián dio una orden de mando, y el resto de su Guardia sepulcral acotó el espacio donde se encontraban los Skaven contaminando desquiciadamente con sus extrañas armas todo lo que tocaban. Itchitt abrió su libro de la Aflicción, y con su voz de roedor recitó un versículo. Uno de los esqueletos, que cubría su cráneo con los restos de una capa con capucha, caminaba arrastrando una enorme guadaña. El suelo se reblandeció a su alrededor, y la textura de la tierra del piso cambió, comenzó a burbujear y los astillados huesos de los pies comenzaron a derretirse, fundiéndose con la corrupta tierra. La articulación se quebró a la altura del tobillo y el esqueleto continuó caminando torpemente, alternando la pierna coja con el apoyo del palo de la guadaña como muleta. Con gran agilidad, Poxlix saltó y hundió sus ponzoñosos cuchillos en la caja torácica del esqueleto sin aparente resultado. bajo el embozo de la capa del no-muerto solo quedaban sus huesos desnudos. Una enorme espada entró por los omóplatos del skaven haciéndole chillar de dolor. Dejó de chillar cuando la punta salió por su pecho, empalándolo junto al esqueleto embozado contra el que luchaba. El Campeón esqueleto, extrajo el largo filo de los inertes cuerpos sin piedad, y se dirigió inexorable hacia el resto del pack de Portaplagas. Los ojos de las ratas brillaban dentro de una nube verdosa que los cubría. Venderían caras sus miserables vidas...
Partida completa en formato #championship de la Guardia Sepulcral (reeditada) contra los Portaplagas de Skabbik.
#warhammer #wargaming #paintingminiatures #tabletopgaming #pmz